miércoles, 28 de enero de 2009

NECESITO QUE VUELVAN YA.
No soy tan mayor. Antes abrías una página y los elementos ermegentes tenían el mismo denominador común. Ya podías navegar hacia la red de politonos que a la página de la seguridad social, en ambos casos, aquello era una lluvia de estrellas, explícale a tu madre cómo tenías que quitarte de encima las tías en pelotas y las ofertas para trincar dinero fácil. Ahora que cierras una pestaña y te espera el último espoiler que te arruine el día y la mayoría de mis páginas favoritas abren todas con lo mismo, echo de menos las tías en bolas y las webcams. Las páginas con el careto del que piso por primera vez el casino virtual y se hizo rico. El mismo que en otra página parecida te lo cuenta en primera persona y se sincera para que tú hagas lo mismo. Mira que hay politonos y putas en la red. Pues ahora, nada de nada. La peña ha cambiado. Ya nadie quiere ver la mona de Paris Hilton en el cumpleaños de su prima ni conocer a cuatro cachondas que están ansiosas por tomar algo informal contigo. Sólo quedan ojos para lo mismo.

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