LA LIGA DE NEYRO.
Aquella liga de Petrovic fue suya. Es verdad que en la segunda parte de aquel partido que se jugó en el Palau no se despegó la boca del silbato y cosió a faltas la defensa del Madrid, que se quedó sin jugadores y terminó el partido en cuadro, esperando el final. Pero tampoco creo que fuera para tanto. He visto el partido varias veces. Entonces Neyro se ganó una popularidad desmesurada. Aun no había realities ni proliferaban famosos de medio pelo como ahora que le disputaran el trono deportivo que entonces se forjó con dos guebazos. Recuerdo haber leido de sus amenazas, llamadas telefónicas a media noche (tampoco nadie había oido hablar de movistar) y salves patrióticas, arriba España, Neyro cabrón, Madrid campeón! con el que la gente cumplía penitencia. Supongo que esos mismos que perdieron el tiempo marcando el número de Neyro, finalmente se cansaron de hacerlo o se hicieron mayores o tuvieron hijos. O murieron intentándolo. Ayer leí en prensa la noticia de su muerte. El mismo día que nos enteramos que el padre de Chuso no pudo tampoco despertarse de la siesta. Dos infartos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario