domingo, 5 de julio de 2009

A PEDALES.
Joserra Uriarte ayudó a conseguir varios de los Tour que tiene Indurain. Era una de aquellos gregarios anónimos que escoltaban al navarro, dicen ahora las reseñas que uno aun pueden encontrar en los periódicos y con los que pretendían que el ex-ciclista del Banesto fuera finalmente recordado. Hasta que nació su primera hija y su esposa Nerea venció su enfermedad. Todo cambió. Ambos lucharon varios años contra el cancer. Cambió su forma de afrontar la vida, supongo, y el modo de celebrarla. Entonces constituyeron una fundacion de ayuda contra el cancer. Estuvieron varias veces en la Notaría. Y el viernes nos invitaron a un concierto benéfico que Carlos Baute dio en San Sebastián. No faltó ni Indurain.
Llevo de culo varios días. Tengo invitados. Odio la pachanga y Carlos Baute me parece una broma. He resumido el asunto lo más breve que he podido. Pero había que estar.

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