BENICASSIM. 1920.

Sigo sintiendo nostalgia cada vez que escucho distraido la noticia y aparecen los primeros campistas camino del infierno. Ahora la mayoría son ingleses. De éstos a los que les da lo mismo, ni se enteran, que el avión se desvié unos kilómetros más arriba y caiga en Benicassim, donde no modifican un ápice sus hábitos, que da lo mismo. Han mejorado la zona de acampada y las instalaciones comunes. Cuando estuve hace cuatro años incluso había un tío a la entrada de los baños que repartía en dosis certeras trozos de papel higiénico. Pero el resto parece siempre igual. Cambia la nacionalidad de los asistentes, pero a veces parece que en el telediario nadie se ha molestado en meter imágenes nuevas para documentar la noticia que sigue exclusivamente interesando para cubrir el rollo ese social. Siguen tocando Oasis y Los Planetas. También entonces me pareció que los hermanos Gallagher estaban justo en el punto en que se encontraban ayer. Tocaban Rock´n roll star y David Cantero hablaba de lo mismo. De que los primeros campistas llegaban al pueblo y la música inundaba sus calles. Todo igual.