viernes, 24 de julio de 2009

EN BABIA.
Hace siglos que las cosas dejaron de valer por lo que son y comenzaron a tenerse en cuenta por otras cosas, lo que parecen a la vista, los sentimientos que provocan o lo que a uno le apetece que realmente sean. Y durante ese mismo tiempo en el que Jesús Hermida alcanzó la fama, aburrio a media España y se echó a dormir, nadie tuvo tiempo de avisarle que lo de la luna ya es agua pasada y que las discusiones que avivaron entonces la polémica y abrieron el debate de si todo aquéllo era verdad quedaron ventiladas totalmente, el mismo día en el que se dio matarile a Mili Vanili y se decidió lo que era fraude y lo que no y si merecía la pena hacerse mala sangre por todo aquéllo o tirar pa lante. A quién le importa si The pains of being pure of heart es una copia de los Jesus. O si no llegaron a la luna y se quedaron tomando cañas. Pues que les aproveche a Armstrong y a su equipo, que se lo tienen ganado.

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